Vivir desde nuestra Esencia desidentificándonos del personaje-ego

Vivir desde nuestra Esencia desidentificándonos del personaje-ego.

Vivimos desde el personaje-ego condicionado cuando estamos en piloto automático y actuamos inconscientemente. Queremos llevar la razón, nos enfadamos con frecuencia o no sabemos ponernos en nuestro lugar y marcar límites de forma armónica, somos controladores  o demasiado sumisos/as, queremos que todo y tod@s sean y vivan como nosotros/as queremos. Perdemos los nervios con facilidad, nos descontrolamos, llevamos a cabo acciones que no nos benefician, incluso nos dañan… Sentimos soberbia, envidia, resentimiento, odio. Criticamos de forma dañina… Se puede vivir rodeados de miedos, inseguridades… El exceso de «autoestima» (narcisismo) o la carencia de la misma tiene mucho que ver, también, con vivir desde el personaje-ego.  Dos o más  egos enfrentados generan muchos conflictos, lo cual nos hace perder el equilibrio y la paz interior. Los personajes-ego se mueven de extremo a extremo, es un sube y baja continuo en relación a los estados de ánimo, gestión de las emociones,…

Vivimos desde nuestra Esencia cuando tenemos momentos donde paramos, nos escuchamos y serenamos. Vivimos pausadamente, sin estrés, más en calma. Sentimos y actuamos de manera más armónica. Somos conscientes de que la vida tiene rachas y ciclos maravillosos y otros más complejos. Los momentos delicados los gestionamos desde la aceptación. Sin entrar en la desesperación, buscamos soluciones. Vivimos momento a momento, disfrutando de las pequeñas cosas. Somos comprensivos y conciliadores, con nosotr@s y con los demás. No nos importa ceder (aun en los casos que sabemos con seguridad que tenemos la razón y la otra persona es quien está equivocada). Priorizamos nuestra paz y equilibrio interior (y la propia convivencia en pareja, familiar…) por encima de tener que tener la razón. Nos focalizamos en las cosas positivas y maravillosas de la vida, en lo que es importante para nosotr@s y nos aporta. Evitamos (siempre que sea posible) todo lo que nos aleja de nuestra paz. Valoramos lo bello y bonito en nosotr@s, en nuestra vida y en los demás. Disfrutamos lo sencillo y cotidiano. El agradecimiento es un valor fundamental.  

Trabajamos el autoconocimiento, el autocuidado y equilibramos nuestra autoestima para así VIVIR de manera más consciente, auténtica y real, saliendo del patrón de dependencia emocional. Aprendemos a VIVIR CON MAYÚSCULAS, VIVIR DE VERDAD. Somos agradecid@s con todo lo que hay en nuestra vida. 

Nos encanta estar en soledad (disfrutando en nuestra presencia) y nos encantan también los momentos de compartir. Potenciamos los momentos de introspección y los momentos de compartir por igual, en equilibrio.

En el punto medio está la sabiduría.

Profundizamos más en estos puntos dentro de los bloques de trabajo: EDUCACIÓN EMOCIONAL Y ESENCIAL Y EDUCACIÓN EN VALORES. 

En los CURSOS de Autoestima, Autocuidado, Autoconocimiento y Mejora de la Convivencia así como en SESIONES INDIVIDUALES, EN PAREJA, FAMILIARES y GRUPALES.