Entradas de] Lourdes del Álamo Rabadán

Educación tradicional Oficial y Educación Consciente

Hasta ahora la educación predominante es la educación que podemos llamar tradicional (la que habitualmente se imparte en los centros educativos oficiales, desde edad infantil a enseñanzas superiores). Es cierto que en la hora semanal de tutoría (hora que en los cursos superiores suele desaparecer) se van trabajando algunos aspectos en relación a la educación emocional. Muchas veces en realidad esa hora se dedica a resolver conflictos que surgen a diario. En cualquier caso, una hora a la semana no da para mucho. El foco principal de los centros educativos oficiales sigue siendo trabajar la competencia intelectual a través de los contenidos de las diferentes materias que se imparten.

Las últimas leyes educativas incluyen desarrollar diferentes competencias a través de todas las materias pero, en la práctica, hay que impartir temarios muy amplios bajo unas exigencias burocráticas-administrativas cada vez mayores. Esto, unido al gran número de conflictos que surgen en las aulas (y va en aumento) hace prácticamente imposible dedicar tiempo a otros aspectos de vital importancia. Por lo tanto, la casi totalidad del tiempo va dedicado a impartir amplios temarios, rellenar numerosos papeles burocrático-administrativos, informes… y resolver conflictos (consecuencia de la gran pérdida de valores en la actualidad).

Lo prioritario en la enseñanza oficial sigue siendo la competencia intelectual (se adorne como se adorne en las leyes educativas, en las estadísticas, informes, memorias…). No hay horas reales para trabajar el resto de competencias (salvo muy por encima desde cada materia, como buenamente cada uno pueda).

El fin principal en la Educación tradicional Oficial (hasta la fecha) es que los alumn@s adquieran conocimientos intelectuales de las diferentes materias (en el mejor de los casos), fomentando una competitividad exagerada.

En la Educación Consciente es muy importante la competencia intelectual pero, igualmente importante lo son otras competencias (y se trabajan de verdad, no en la teoría). Para ello es fundamental dedicar suficientes horas a la semana para el desarrollo de todas.

-Se dedica tiempo real a las competencias emocional y esencial; trabajando aspectos relacionados con la autoestima equilibrada, el autocuidado (físico, mental, emocional y social) y el autoconocimiento. El cuidado de la salud mental (aprendiendo a pensar de manera sana…) La competencia fisiológica: Educar en una alimentación equilibrada y natural, el cuidado del cuerpo físico (principalmente por salud).

-Primordial es también trabajar la educación en valores (la mejora de la convivencia) y la prevención de adicciones tecnológicas (y adicciones en general).

-De vital importancia el desarrollo también de la competencia creativa.

Lo realmente maravilloso es lograr que la Educación Consciente se introduzca en la educación oficial. ¿Cómo? Dedicando suficiente número de horas a las diferentes competencias (horas reales). Que la prioridad sea el desarrollo de seres humanos íntegros, equilibrados, conscientes y más felices (no únicamente acumuladores de contenidos intelectuales). Que se impartan de verdad todas las competencias por profesionales suficientemente cualificados para cada una de ellas.

Autoconocimiento para Vivir en Esencia y así Educar en Esencia.

Según la RAE (Real Academia Española) “Esencia” significa:

-Aquello que constituye la naturaleza de las cosas, lo permanente e invariable de ellas.

-Lo más importante y característico de una cosa.

Así, podemos definir “Esencia” como la parte más importante y característica de algo o alguien. Es decir, la parte más auténtica que somos.

Por norma general vivimos en piloto automático (de manera inconsciente), a través de patrones adquiridos desde la infancia, desconectados total o parcialmente de nosotros.

Es a través del Autoconocimiento que, poco a poco, vamos conectando con nuestra verdadera Esencia, aprendiendo a vivir de manera más consciente, más atenta, más real y plena.

APRENDER A VIVIR DESDE NUESTRA ESENCIA es fundamental para APRENDER A EDUCAR EN ESENCIA.

En el Aula de Educación Consciente y Creatividad “Esencia” trabajamos aspectos relacionados con:

  • La Educación Emocional y Esencial
  • La Educación en Valores
  • La Educación Creativa

Los tres bloques son fundamentales para conocernos de verdad, saliendo del piloto automático y así vivir más conscientes, fomentando el desarrollo de seres humanos más plenos, íntegros y felices; en mayor paz, armonía y coherencia. Nos convertimos en creadores, artistas de nuestra vida.

Aprendemos a Vivir desde nuestra Esencia, desde la parte más real que somos. Conectamos con todo lo bello y bonito que hay en nuestro interior y acogemos, también, las partes menos bonitas para comprendernos, aceptarnos, querernos, cuidarnos y así vivir en más equilibrio.

-El autoconocimiento es clave para conocernos de verdad.

-Es fundamental trabajar nuestro interior. Reconocer nuestras “luces” (lo más destacado y positivo; nuestras virtudes) y reconocer también nuestras “sombras” (los aspectos a trabajar).

Dedicar al menos 30 minutos al día para estar a solas, en silencio, mirando en nuestro interior es fundamental. Observar cómo nos sentimos. Dedicar un tiempo a la introspección, a la reflexión. Es en esos espacios que poco a poco vamos conociéndonos más y conectando con nuestra Esencia, nuestra verdadera naturaleza, nuestra parte más auténtica y bella. Es un tiempo para nosotr@s. Sin juicios (siendo ecuánimes). Aceptando lo que hay y sentimos (siendo conscientes que los estados de ánimo, como todo en la vida, son cambiantes e impermanentes).

Lo relacionado con este apartado lo trabajamos en el curso sobre Autoestima, Autocuidado y Autoconocimiento (en sesiones individuales, en pareja, familiares o grupales).

Agradecimiento

Aprovecho la ocasión para agradecer a mis padres el profundo respeto que siempre me inculcaron hacia mis profesores. Me transmitieron un cariño impresionante hacia ellos, siendo personas cruciales en mi vida, modelos a seguir.

Hoy en día es más habitual de lo que se debiera que muchos padres y madres hablen mal a sus hij@s de sus profesores. Las críticas van en aumento, siendo realmente alarmante.

Muy criticados por el horario, sueldo y vacaciones, lo que nadie parece tener en cuenta es que, además de las horas de trabajo por la mañana hay que trabajar muchas, muchas horas por la tarde, en fines de semana, puentes… Es un trabajo silencioso,  que está pasando totalmente desapercibido.

Cuando impartes una materia de 2 horas a la semana sueles tener una media de 8-9-10 grupos que, multiplicados por 27-30 alumn@s en cada uno de ellos pueden salir, sin exagerar, entre 250-300 alumnos por curso escolar . Preparar las clases para tal cantidad de alumnos (con gran diferencia de niveles), llevar a cabo los informes individualizados de los mismos, las adaptaciones curriculares oportunas, preparación de las clases, actividades, exámenes, correciones, lecturas de correos electrónicos del equipo directivo, compañer@s, alumnos y familias, exigencias desproporcionadas administrativas, informes, estadísticas, cambios legislativos continuos (con lo que hay que modificar por completo programaciones, temarios…) es en la actualidad una carga de trabajo brutal que muchas personas en general y familias – alumn@s en particular, desconocen.

Hay que trabajar muchas horas fuera de las aulas para desempeñar dichas funciones.

 

Es nuestro trabajo, y lo llevamos a cabo tal como nos corresponde pero es importante que esto se sepa pues entonces deja de tener sentido por completo las críticas de muchos padres-madres a los profesor@s por la cantidad de supuesto tiempo libre que tenemos y las pocas horas que trabajamos pues es totalmente falso. Están lanzando un mensaje a la sociedad y a sus hij@s que es mentira. Y, educar en la mentira y la crítica falsa e infundada no es precisamente un valor a inculcar.

En mi casa jamás oí ni una sola crítica hacia mis profesores. Todo lo contrario, siempre se nos inculcó a mi hermano y a mí un respeto absoluto y precioso hacia ellos. Para mí eran mis referencias. Mis profesores eran sagrados, y lo siguen siendo. Mi profundo agradecimiento a todos ell@s por tanto que me aportaron y enseñaron. Ejemplo de valores.

Es triste ver cómo en los últimos años han aumentando las críticas, los insultos y las faltas de respeto graves en las aulas. Actitud intolerable en muchos alumn@s que es reforzada, casi al cien por cien, por sus familias.

A esto se une lo que muchos padres dicen cuando llamas para informar y tratar de buscar soluciones por la mala actitud de su hij@ y porque impiden por completo poder dar la clase: “a ti te pagan para aguantar, así que aguanta”. Gran error pensar así, a los profesor@s no nos pagan para aguantar, nos pagan para enseñar a sus hij@s” (Muchos de los cuales nos impiden a diario poder desempeñar nuestro trabajo dentro de las aulas por manifestar una actitud totalmente irrespetuosa y disruptiva).

En los últimos cursos que he impartido clase en secundaria me he encontrado  con que de los 8-9-10 grupos que he tenido por curso el 70-80 % de los alumn@s han mostrado un nulo interés por el aprendizaje y una actitud negativa o incluso totalmente irrespetuosa y disruptiva. Dar clase en dichos grupos resulta prácticamente imposible pues las interrupciones son continuas (por hablar, risas, uso del móvil, juegos, insultos, peleas entre ellos… es lo habitual). La mayoría de ellos no lleva el material de trabajo y van a pasar el rato (jamás hacen deberes ni estudian). Y, lo peor de todo, es cuando llamas a las familias y la respuesta son críticas, insultos, desprecios, no creen lo que les dices y justifican en sus hij@s lo injustificable. Esto es con lo que muchos profesor@s tenemos que lidiar a diario, cada vez más, en los últimos años. 

Evidentemente no todos los centros son iguales; depende de las zonas. Afortunadamente no todas las familias son así. Pero es una tendencia generalizada que va en aumento en cada vez más centros.

En los muchos años dedicada a la enseñanza (la mayoría de ellos en secundaria) he visto un declive absoluto de la educación y actitud en bastantes alumn@s (el respeto y los valores en muchos casos brilla por su ausencia) .

Es imprescindible que en las familias se inculque el valor del respeto en general y, hacia los profesores, en el caso particular que nos ocupa.

También ocurre que muchos hij@s a los primeros que no respetan es a los padres. En demasiadas ocasiones te dicen: “no respeto a mis padres te voy a respetar a ti” o “me suda la p…. lo que me dicen mis padres por completo así que imagínate lo que me dices tú”…

De esta manera es muy complicado poder desarrollar el trabajo como se debiera.

Si supieran lo que realmente está sucediendo en la actualidad dentro de muchas aulas nadie nos tendría la envidia que nos irradian muchas familias y adultos por “el supuesto tiempo libre que tenemos debido a las pocas horas que trabajamos”. Ese tiempo libre no es tal (como ya he aclarado anteriormente) y desempeñar las funciones que nos corresponde dentro del aula se está convirtiendo en profesión de alto riesgo en muchos casos (por insultos, desprecios e incluso, a veces, agresiones, destrozos en los coches…).

Conviene hablar claro al respecto y que se sepa la verdad de lo que está sucediendo hoy día:

-Faltas de respeto muy graves hacia los profesor@s.

-Imposibilidad de desarrollar el trabajo que nos corresponde con normalidad por las interrupciones continuas.

-Muchísimas situaciones conflictivas.

-Muchos alumnos van al instituto a pasar el rato, no llevan nada de material y quieren continuar la fiesta del fin de semana (lo único en lo que basan su vida).

-Críticas y desprecios de cada vez más familias…

PROFUNDO AGRADECIMIENTO A MIS PADRES POR EL RESPETO ABSOLUTO QUE NOS INCULCARON HACIA NUESTROS PROFESORES  Y QUE HOY DÍA TANTA FALTA HACE PARA QUE LAS AULAS VUELVAN A SER LUGAR DE AMOR POR EL APRENDIZAJE Y LA CULTURA, LO CUAL NOS HACE MÁS LIBRES, SERES MÁS ÍNTEGROS, CON VALORES Y RESPETO. VITAL PARA QUE LA CONVIVENCIA DENTRO Y FUERA DE LAS AULAS SEA POSIBLE.

 Caso real 7

En las aulas de educación secundaria el 100 % de los alumn@s van a clase con el móvil (salvo muy contadas excepciones). Desde edades cada vez más tempranas también está sucediendo en primaria.

¿Alguien cree que con el móvil encima van a estar centrados en sus estudios y en el aprendizaje?

Muchos padres nos dicen que no entienden cómo suspenden tantas materias pues están toda la tarde encerrados en su habitación estudiando, haciendo deberes… ¿con el móvil y el ordenador delante?

¿Es necesario realmente que tengan móvil con esas edades y más aún que lo lleven a clase?

La gran mayoría de padres-madres y adultos en general no son conscientes de cómo se dispersan y se distraen sus hij@s con las pantallas. Claro que si lo que quieren es que estén entretenidos y no molesten, sin duda es la mejor opción (con las pantallas se abstraen del mundo y ni se mueven).

En clase es una lucha continua pues a la mínima oportunidad ya están mirando la pantalla. Basta con que te gires para anotar algo en la pizarra, que vayas a la mesa de un compañero, que te dirijas al tablón de anuncios del aula a poner algo nuevo… para que rápidamente estén con el dispositivo.

Muchísimas veces hay que interrumpir las explicaciones por este motivo (además de otras razones que vamos explicando en otros artículos). Supone parar la clase, tener que llamar la atención y coger el móvil, poner un parte por ello como se indica en las NCOF  (normas de convivencia, organización y funcionamiento de centro), llamar a las familias… Y, además, a veces los alumnos se niegan a entregarlo, o entran en cólera, se vuelven violentos…

¿Sería mucho pedir reflexionar al respecto y ver las consecuencias de lo que está sucediendo?

Antes no teníamos móvil y no pasaba nada.

¿Por qué ahora todos tienen que llevar el móvil a clase?

Están la mayoría más pendientes del móvil que de sus estudios y aprendizaje. Más pendientes del móvil que de su vida.

También ocurre que hay numerosos casos de acoso por las redes sociales.

¿Qué hacen niñ@s y jóvenes utilizando las redes sociales a todas horas sin ningún tipo de criterio y madurez?

¿Para qué lo utilizan?, ¿con qué fines?, ¿les corresponde por edad?

Se les va el tiempo con las pantallas. Cada vez más casos de adicción y, obviamente, no dedican tiempo a su formación y, mucho menos a temas de autoestima, autocuidado y autoconocimiento (cosa que la mayoría de adultos tampoco hace por lo que no se da ejemplo coherente al respecto). Pequeños y jóvenes son imitadores del mundo adulto.

CONSECUENCIAS DE LLEVAR LOS MÓVILES AL AULA:

-Distracciones continuas.

-Dispersión.

-Descentramiento.

-Interrupciones del desarrollo normal de las explicaciones por tener que parar a llamar la atención, coger el móvil…

-Hacen fotos, vídeos… de profesores, compañeros… lo cuelgan en las redes sociales burlándose…

En los centros educativos hay teléfono. Si sucede algo importante los padres-madres pueden contactar a través del centro.

A veces me han dicho alumn@s que estaban con el móvil mientras yo estaba explicando: “ es que me estaba escribiendo mi madre”. Lo cual, no deja de sorprenderme, la verdad. Madres y padres escribiendo a su hij@ por whatsapp en horario lectivo, mientras estamos en clase.

Pasan tantas horas en las pantallas que es imposible que estén centrados en lo verdaderamente importante: el autocuidado, autoconocimiento, su formación, el deporte, el contacto con la naturaleza, jugar de forma sana… Lo vital en los años que tienen.

Quienes primero hemos de dar ejemplo de no usar el móvil a todas horas y cuando no corresponde somos: padres-madres, profesor@s y adultos en general.

Una vez más, como en artículo anteriores, pregunto:

¿Qué estamos haciendo?

¿Somos conscientes de lo que está ocurriendo?

Animo a reflexionar al respecto y, en la medida de lo posible, buscar soluciones.

 

Lo relacionado con dicha temática lo trabajamos más a fondo en el  CURSO DE PREVENCIÓN ADICCIONES TECNOLÓGICAS (y adicciones en general). En sesiones individuales o taller grupal. Contenidos:

-1. Problemática actual en adultos, niños-as y adolescentes.

-2. Estudio de casos reales y pruebas científicas al respecto.

-3. Educando en el uso adecuado de las nuevas tecnologías. Pautas.

-4. Orientaciones para el uso progresivo de pantallas (por tramos de edad); adquiriendo un criterio de selección de información adecuado y en límite horario.

-5. Reduciendo el riesgo de adicción al mínimo a través de actividades saludables.

Cómo afectan las pantallas al cerebro

-La felicidad depende del sentido que cada uno de nosotros le damos a nuestra vida y la manera en que elegimos vivir.

-En una sociedad que en muchas ocasiones ha perdido el rumbo, estamos sustituyendo el sentido de la vida por sensaciones inmediatas (comida, sexo inconsciente, drogas, consumismo exagerado… de manera totalmente adictiva).

-Las pantallas multiplican las sensaciones instantáneas, generando una gran sensación de frustración y vacío si no las usamos. Dependemos de las pantallas para sentirnos bien. Las pantallas generan placer, en relación con la hormona de LA DOPAMINA. La dopamina se activa cuando tenemos ganas de consumir algo, llega al pico más alto cuando lo consumimos, y después viene el bajón, generando una gran sensación de frustración, negatividad, ansiedad… provocando la necesidad de seguir consumiendo (pasa al tomar drogas, alcohol, e igualmente cuando consumimos pantallas; al recibir likes, en redes sociales, mensajes, notificaciones… nos sentimos queridos a través de esto. Aumenta la dopamina y queremos más y más y más).

El funcionamiento es similar al consumo de drogas. Los psiquiatras están trabajando con fármacos similares para tratar adicciones a la cocaína y adicciones a pantallas (redes sociales, pornografía, videojuegos…).

Cuando no se consume (tanto cocaína… como pantallas) la sensación de frustración y vacío es cada vez mayor.

-Hay un exceso de información y falta de formación. Hiperestimulación y gratificación instantánea. Tapamos con las pantallas el vacío interior. Cada vez estamos más desconectados de nuestra esencia.

-Buscar un uso adecuado de pantallas en relación al trabajo (y/o estudios).

Se está recurriendo a las pantallas por estrés y aburrimiento.

Triunfar en la vida es: ser dueño de nuestra vida, mantener un equilibrio interior, conectar de forma sana con lo que nos sucede, saber gestionar el estrés y el aburrimiento…

Coger el móvil (tablet, ordenador…) cada vez que estamos estresados o aburridos, genera una sociedad cada vez menos tolerante al estrés y el aburrimiento; nula tolerancia a la frustración, queremos todo inmediato (no sabemos esperar, no sabemos aburrirnos, no sabemos posponer la recompensa. Es la era de la inmediatez).

-El amor y el trabajo son dos pilares que nos conducen al sentimiento de felicidad. Ambos requieren de constancia, voluntad, paciencia, cariño, dedicación… es decir, tiempo y capacidad de posponer la recompensa.

La CORTEZA PREFRONTAL del cerebro es fundamental. Se encarga de la atención, de la concentración, de la resolución de problemas y del control de impulsos. Nos ayuda a tener fuerza de voluntad, a superar las dificultades, a buscar soluciones, a prestar atención. Diferencia lo bueno de lo que no nos conviene, lo interesante de lo que no lo es. El desarrollo de la corteza prefrontal de manera equilibrada es fundamental para mejorar nuestra calidad de vida y bienestar. Las pantallas bloquean la corteza prefrontal.

Cuando un bebé nace, la corteza prefrontal es inmadura. El cerebro se desarrolla desde la parte de detrás a la parte de delante.

 

La corteza prefrontal del bebé se activa con: luz, sonido y movimiento. Si se les fomenta las pantallas, se sobre-estimula la corteza prefrontal, con lo que les va a resultar mucho más complicado tener atención a cosas o personas que no sobre-estimulan de forma tan artificial y exagerada (cuando no hay luces, sonidos estridentes, colores llamativos…). Les va a resultar muy complicado atender explicaciones de profesores, por ejemplo, o centrarse en una acción. Las pantallas son luz, sonido y movimiento.

El cerebro funciona con un mecanismo que se denomina “usit or loose it” (o lo usas, o lo pierdes). A medida que utilizamos más y más las pantallas, se pierden partes útiles de nuestro cerebro (lo más significativo; pérdida de memoria y de atención). Utilizamos internet o wikipedia para todo y EL HIPOCAMPO, que es la zona del cerebro del aprendizaje, cada vez se va haciendo más pequeño. Con las aplicaciones de ubicación, cada vez nos orientamos peor. Las zonas del cerebro se empiezan a atrofiar y a funcionar peor cuanto menos lo estimulamos (cuanto menos lo trabajamos). Con la corteza prefrontal sucede lo mismo. Si potenciamos la corteza prefrontal con luz, sonido y movimiento (mediante pantallas), la corteza no va a evolucionar de la forma adecuada. Se están potenciando generaciones con nula capacidad de prestar atención, sin concentración, cero tolerancia a la frustración, descontrol de impulsos…

El 10 % de la población del primer mundo está tratada en la actualidad psiquiátricamente por el trastorno conocido como déficit de atención e hiperactividad, falta de control de impulsos. Falla la corteza prefrontal.

En la actualidad hay grandes CRISIS DE ATENCIÓN.

Qué podemos hacer en el día a día:

Quitar notificaciones. Si yo quiero algo, soy yo quien me meto en el teléfono, no el teléfono quien me dice que me tengo que meter. Si no, es el teléfono quien me domina (como cualquier droga o adicción). Nula creatividad, nula capacidad natural de responder a los estímulos. Sin notificaciones se vive mucho más en paz.

Consultar el móvil en momentos puntuales. Reducir su uso (especialmente para temas no relacionados con el trabajo).

Reducir el tiempo de uso de las redes sociales, especialmente Instagram que es la más utilizada. Establecer un tiempo máximo (15-30 minutos al día). Está diseñado para enganchar más y más.

Poner el modo avión o apagarlo directamente siempre que sea posible

Crear espacios y tiempos sin móvil (ni pantallas).

Salir a la Naturaleza, potenciar actividades manuales y creativas. La lectura y escritura, las artes. Dedicar tiempo a actividades saludables.

Compartir con las personas, libres del móvil (y pantallas). Al comer, charlar, pasear… Los estudios empiezan a decir que los niños sienten abandono por parte de sus padres porque usan el móvil constantemente.

Conectar en el tú a tú con las personas.

La pantalla es útil y buena, siempre y cuando seas tú capaz de controlarlo, de diseñar para qué lo necesitas, sin entrar en un estado de dependencia, ansiedad, depresión… Utilizar las pantallas el menor tiempo posible.

Un porcentaje muy grande de los problemas de niños, adolescentes y jóvenes viene derivado por un mal uso de las redes sociales y la adicción a pantallas. Pasan desde edades cada vez más tempranas demasiado tiempo con pantallas, descuidando totalmente los aspectos importantes de su vida; relaciones reales, autocuidado, formación… viven desconectados por completo de su interior, de su esencia.

Lo expuesto en este artículo son ideas-clave del vídeo: “Somo adictos”, de la doctora Marian Rojas Estapé. Recomiendo ampliar la información escuchando el vídeo completo, si aún no lo has hecho. Puedes acceder a él desde la ZONA AUDIOVISUAL (dentro de los vídeos sobre prevención de adicciones tecnológicas).

Estaría muy bien que reflexionemos sobre todas estas ideas y nos preguntemos:

¿Cómo estamos viviendo?

¿Qué modelo de adultos estamos siendo?

¿Qué modelo de vida estamos transmitiendo a los más pequeños?

Competencias que trabajamos en la Educación Consciente

La Educación Consciente se focaliza en 5 ejes de competencias :

1-La competencia fisiológica (potencia una alimentación más natural y equilibrada, el cuidado del cuerpo físico, el deporte saludable…)

2-La competencia emocional (trabaja aspectos relacionados con la educación emocional, el autocuidado, la autoestima…)

3-La competencia esencial (aprendemos a conectar con nuestra esencia
para vivir desde nuestra mejor versión. Se trabaja el autoconocimiento, el mindfulness…)

4-La competencia creativa (se fomenta la creatividad y expresividad en los diferentes apartados de la vida así como desde el ámbito artístico…)

5-La competencia intelectual (contenidos intelectuales a través de las diferentes materias. Es el foco principal en los centros educativos)

En “ESENCIA”, Aula de Educación Consciente y Creatividad trabajamos:

BLOUE 1. LA EDUCACIÓN EMOCIONAL Y ESENCIAL

-Competencia Emocional (Autoconocimiento y Autocuidado;
Autoestima equilibrada y gestión de las dependencias emocionales).

-Competencia Esencial (A través de técnicas de Mindfulness
/Atención/ y Meditación vamos desarrollando el verdadero Autoconocimiento,
aprendiendo a vivir más conscientes, en mayor paz, calma y serenidad.
Aprendemos a conectar con nuestra Esencia; la parte más auténtica, real y
maravillosa que hay en nosotros, conectando con nuestra mejor versión).

BLOQUE 2. LA EDUCACIÓN EN VALORES

-Valores y pautas para armonizar la convivencia: en pareja, familiar, grupal y la relación con uno mism@.Para que la convivencia en pareja,  familiar y grupal sea armónica es fundamental que la relación individual esté en equilibrio. Hay que partir del trabajo interior individual para pasar después al trabajo en pareja, al trabajo familiar, grupal…Sin un equilibrio interno  resulta muy complicado que el resto de opciones de convivencia sea posible.

En este bloque también trabajamos la prevención de adicciones tecnológicas (y adicciones en general).

BLOQUE 3. LA EDUCACIÓN CREATIVA

El tercer bloque fundamental en nuestro trabajo gira entorno a la educación creativa. Tan fundamental en la educación de niños y adolescentes. La Creatividad potencia VIVIR con mayúsculas; la sensibilidad, la profundidad, la expresividad, Vivir desde el Corazón…

Todo, todo tiene su sentido y utilidad.

Necesario y fundamental hallar el equilibrio mente-corazón.

En el punto medio está la Sabiduría.

Las materias científico-tecnológicas son importantes y muy
necesarias, sin duda. Del mismo modo lo son las materias de letras y las artísticas, así como las de actividad física. Razón y Corazón por igual.

Se puede ampliar información en los artículos anteriores de la categoría Educación Consciente del BLOG. También se puede escuchar el AUDIO relacionado en la ZONA AUDIOVISUAL.

La Educación consciente es la base de todos nuestros cursos y sesiones.

Padres-colegas y Profesores-colegas

Haciendo un ejercicio de honestidad, podemos ver y reconocer, como venimos señalando en artículos anteriores, que en los últimos tiempos todo ha dado un giro brutal. A veces no para bien. Observamos:

Gran confusión de roles entre padres y profesores; corresponde a los padres educar y, a priori, a los profesores enseñar una materia (y reforzar los valores que han de venir de casa).

Existen lo que llamo:  padres-PADRES y padres-colegas.

-Se pueden ver:  profesores-PROFESORES y profesores-colegas.

Muchos adultos en la actualidad son colegas de los niños y adolescentes. Es un error, con serias consecuencias, pues si todos somos colegas de todos, los niños y adolescentes quedan sin referencias, sin modelos a seguir de coherencia. Por supuesto, hay que ser dialogantes, cariñosos, educando y enseñando desde el respeto, mas un padre no ha de ser un colega del hijo ni un profesor ha de ser colega del alumno. Los adultos, en general, hemos de ser modelos de referencia, no colegas. Mostrar madurez, responsabilidad, coherencia, les da estabilidad. A veces es muy necesario la firmeza.

Ha de haber un respeto hacia el padre-madre, un respeto hacia el profesor-profesora. He visto y oído, muchas más veces de las que hubiera querido, frases del tipo; ¿Qué pasa tío?, ¿Qué pasa tía? Para dirigirse padres a hijos o viceversa, e igualmente entre profesores-alumnos. También, por ejemplo, padres decir a sus hij@s “me tienes hasta la p…” expresiones que, después, utilizan como natural en casa y en las aulas.

Breves ejemplos de innumerables que se podrían detallar y analizar pero, ahora, lo importante es hacernos conscientes de:

Cómo hablamos a niños y adolescentes. Cómo educamos (los padres) y enseñamos (los profesores en las aulas). El respeto mutuo entre todos es fundamental.

Están aumentando los casos de profesores colegas. Quedan por whatsapp, se siguen por Instagram… interactúan por todo tipo de redes sociales, como si de otro colega más se tratase… Así, los niños y adolescentes están creciendo perdidos, confundidos… (por esto, y otras razones).

En una ocasión que fui al cine, al salir, un grupo de niños estaban comportándose como salvajes y, la madre, de repente les chilló; “desde luego, no se qué leches os están enseñando en la escuela” (Digo “leches” por decir suavemente el término empleado por la madre, el cual fue bastante más inapropiado para hablar a niños). Me impactó oírlo. Hay bastante confusión al respecto pues; la educación principal ha de venir de casa, de la familia. Educar en valores es primordial.

Claro está que, además, la escuela ha de reforzar dichos valores pero no olvidemos que la finalidad principal de los profesor@s es impartir una materia. Por supuesto que hemos de ser también ejemplo a seguir, modelos en valores y educación pero, insisto, la educación principal ha de inculcarse en casa, desde los primeros años.

Se hace imprescindible tener claro la función de cada uno; PADRES EDUCAR, PROFESORES ENSEÑAR Y REFORZAR LOS VALORES. Siendo todos colegas de todos, la confusión y el caos se multiplica entre los más pequeños y jóvenes.

Educar y Enseñar también implica regañar cuando es necesario. A veces, cuando ya se ha dialogado todo lo que había que dialogar, no queda otra opción que ser firmes y hacer cumplir las normas de convivencia, por el bien de todos (obviamente normas lógicas). Son los niñ@s y adolescentes quienes han de dejarse guiar, y no es nada lógico que los pequeños impongan sus decisiones a los adultos, lo cual se puede ver de continuo.  En muchas casas parecen ser los líderes y dirigentes del hogar, adaptándose los padres por completo a las decisiones caprichosas de sus hij@s. Se les está dando un poder que aún no les corresponde por la falta de criterio e inmadurez propia de la edad.

Algo que también hay que tener en cuenta es que, tal como funciona la sociedad actual, la mayoría de los padres y madres trabajan. Muchos niños pasan a ser cuidados por los abuelos, los cuales, tienden más a malcriar (como buenos abuelos que son). Insisto, es a los padres a quienes corresponde educar (y no también malcriar). Si bien, los adultos en general deberíamos tener claro y muy en cuenta que, cuando no educamos, sino que somos consentidores de todo lo que los niñ@s piden y quieren en cada momento, estamos potenciando que se conviertan en niños caprichosos y niños tiranos, sin ningún tipo de educación ni respeto, con consecuencias graves a nivel individual (para ese niñ@) ocasionando serios problemas de convivencia, especialmente durante la adolescencia. Después, muchos continúan siendo eternos adolescentes, sin responsabilidad, coherencia ni madurez… ocasionando mucha desarmonía en cualquier tipo de relación y convivencia, provocando problemas serios a nivel individual, familiar y social.

 

Lo relacionado con dicha temática lo trabajamos más a fondo en el CURSO DE MEJORA DE LA CONVIVENCIA Y EN EL CURSO “APRENDIENDO A VIVIR CONSCIENTES ”.

En sesiones individuales, en pareja, familiar o curso grupal.

Puedes ampliar información en el apartado de cursos y sesiones así como en los diferentes artículos relacionados del Blog.

Observaciones en relación a las últimas leyes educativas

En los cerca de 20 años dedicada a la enseñanza secundaria son muchos los cambios legislativos que hemos vivido. Demasiados, diría yo. Y, en mi experiencia, no siempre cambios acertados. ¿Por qué?

  • Los valores, el trabajo, el esfuerzo, la constancia y dedicación al estudio y aprendizaje cada vez parecen importar menos.
  • Se conceden cada vez más derechos a los niños y adolescentes tiranos y caprichosos pasando a muy segundo plano sus deberes.
  • Suelen primar los intereses partidistas a las necesidades reales de los alumnos.
  • Un número importante de políticos y padres nos restan autoridad al profesorado (evidentemente no todos, pero sí más de los que querríamos).
  • Si exigimos lo normal, si no aprobamos a la ligera, en cada vez más ocasiones somos amenazados, juzgados e incluso denunciados a inspección.
  • Marcar límites (los cuales debieran venir muy claros de casa y no está siendo así) se está convirtiendo en algo realmente delicado pues, cuando lo hacemos (porque es totalmente necesario) somos amenazados, juzgados, y atacados por numerosas familias que justifican de sus hij@s lo injustificable. Con lo cual los alumnos cada vez nos respetan menos.
  • Gran parte de políticos y administraciones exigen papeles, papeles y cada vez más papeles (la mayoría sin ningún sentido) hasta límites que nunca se había antes visto. Pareciera que la burocracia es el eje central de la enseñanza en la actualidad.
  • ¿Dónde están quedando la educación y el respeto?
  • ¿Dónde están quedando valores como el trabajo, el esfuerzo, la constancia?
  • Las últimas leyes educativas son cada vez más permisivas, concediendo demasiados derechos inmerecidos a cambio de cero deberes a los alumn@s con actitud muy disruptiva.
  • La permisividad exagerada en las familias, reforzada por las leyes educativas de los últimos tiempos está multiplicando los cada vez más casos de niñ@s y adolescentes tiranos, caprichosos, sin ningún tipo de educación y respeto. Dificultan enormemente el poder desarrollar las clases.
  • Es imprescindible y más necesario que nunca que los políticos trabajen por un pacto educativo donde vuelva a ser eje central la educación, el respeto, los valores. Una ley educativa que de el lugar que corresponde al profesorado. Una ley educativa que prime la enseñanza y la problemática existente en el alumnado a sus intereses partidistas, de datos y estadísticas. Una ley educativa que no haga perder más tiempo haciendo programaciones cada pocos años, teniendo que modificar de nuevo absolutamente todo. La energía y tiempo que hay que dedicar a todo esto es brutal, mareándonos por completo, creando una desmotivación absoluta. Para poder llegar a hacer un pacto educativo, los políticos son los primeros que debieran dar ejemplo de educación, respeto, equilibrio y coherencia, lo cual no solemos ver en muchos (salvo raras excepciones). Sólo hay que ver cómo se hablan.
  • También es vital que los padres inculquen respeto a la figura del profesor pues, al insultarnos, juzgarnos o desautorizarnos  hacen que los alumnos no nos respeten (por lo que oyen en sus casas, principalmente) y la labor docente y educativa que nos corresponde se hace muy complicada. Resulta muy difícil poder dar clase. Los conflictos son cada vez más. Muchos alumnos no respetan normas, límites, acostumbrados desde pequeños a hacer siempre lo que les viene en gana. Literalmente muchos te dicen: “no hago caso a mis padres, te lo voy a hacer a ti”(dicho suavemente).
  • Los padres han de tener muy claro que cuando un profesor regaña, no es por casualidad. O cuando se llega al límite de tener que poner un parte (después de muchos, muchos avisos). El hij@ llega a casa, cuenta su versión (nada que ver con la realidad) y los padres (en bastantes ocasiones) creen totalmente lo que les dicen. Cuando llamamos para informar recibimos insultos y amenazas. Se está justificando lo injustificable. Hay que tener muy claro que marcar normas y límites forma parte de la educación. Cuando en un aula estamos 30 personas es fundamental el respeto entre todos y tiene que quedar muy claro que al colegio o instituto se va a recibir una formación, que debieran valorar, aprovechar y agradecer. Y, por encima de todo, permitir que los profesores podamos realizar nuestro trabajo (que es enseñar una materia concreta) y que todos los alumn@s puedan recibir esa enseñanza. En muchos centros educativos (especialmente en secundaria) está resultando muy complicado poder impartir clase por la cantidad de problemas de convivencia que están generando alumnos tiranos, maleducados y caprichosos. Las últimas leyes educativas, excesivamente permisivas e incoherentes en muchos puntos, lo están potenciando.
  • Y, por supuesto, los profesores hemos de ser también modelo a seguir. Con aciertos y errores, como todos, pero siendo ejemplo de respeto, coherencia, educación y firmeza cuando es necesario. No todo vale.
  • Asumamos cada cual la función que nos corresponde: padres, políticos y profesores. Si no vamos a una, irá a más lo que ya estamos viendo (gran pérdida de valores, ausencia de educación y respeto, cada vez más casos de jóvenes tiranos, caprichosos, aumento de los conflictos y problemas de convivencia en casa, en colegios, institutos, en las calles…)

Una vez más insisto, ¿qué modelo estamos siendo los adultos para niñ@s y adolescentes?

Obvio que hay padres-madres y alumn@s con una educación ejemplar. Si expongo todo esto es para tomar conciencia, por el bien de todos, que se están multiplicando a velocidad muy rápida los casos de alumnos tiranos, sin educación ni respeto y es vital, entre todos, tratar de buscar soluciones.

Dejemos de mirar en otra dirección. Tan sencillo como que cada uno asumamos verdaderamente nuestra responsabilidad de educar (padres) y enseñar y reforzar los valores de casa (profesores). Seamos todos modelo en positivo: padres, profesores, políticos y adultos en general. Mostremos:

VALORES, COHERENCIA, RESPONSABILIDAD, MADUREZ, EDUCACIÓN, RESPETO.

Consecuencias de la educación permisiva

En los últimos años, los problemas de convivencia en las casas, colegios, institutos… se han multiplicado a un ritmo alarmante. Si no nos hacemos conscientes de lo que está ocurriendo las consecuencias pueden ser muy serias a nivel familiar y social (pues vemos que va a más).

Qué está ocurriendo:

  • Educación totalmente permisiva en muchas casas. Cada vez son más los niñ@s que hacen absolutamente lo que les da la gana. Todo en la familia gira entorno a los intereses y caprichos del pequeño. Todo lo que pide lo obtiene al instante.
  • La educación, los valores y el respeto cada vez brillan más por su ausencia.
  • Much@s son los que comen cuando quieren, lo que quieren y a capricho. Hacen lo que les apetece siempre o la mayoría del tiempo.
  • Demasiados juguetes y cosas materiales, que no valoran y al minuto dejan a un lado. Tienen tantas cosas que no saben ni con qué jugar.
  • Ordenadores y móviles son el centro de sus vidas. Mientras están ahí, claro, no molestan. Desde edades muy tempranas todo gira alrededor del móvil, ordenador y las redes sociales. Crecen totalmente descentrados y fuera de sí.
  • Todo lo que no sea el móvil les aburre, no les interesa. Obvio, si no les estamos enseñando lo que es jugar de verdad, el disfrutar de leer, aprender, de saber, de la cultura, el valor del trabajo, el esfuerzo, la constancia, la motivación, entusiasmarse con la vida real…

Niñ@s y adolescentes aún no tienen criterio para tomar decisiones que no les corresponde por edad. Les estamos dando antes de tiempo un poder que únicamente les convierte en tiranos y caprichosos. Estos casos son víctimas de adultos que eluden por completo la responsabilidad de educar que les corresponde (padres, profesores, educador@s…).

No todo vale. Se están normalizando actitudes que no son nada normales. No se puede justificar todo con la excusa de que son niños o adolescentes. 

Se les están dando concesiones desde que nacen que no hacen más que confundirles y hacerles crecer en desequilibrio. Después no saben comportarse.

Qué necesitan:

  • Orden de vida
  • Horarios
  • Límites
  • Educación en valores
  • Normas de organización
  • Educación emocional y esencial
  • Ver en casa respeto, cariño y educación entre los padres y hacia ell@s.
  • Tener muy claro que son los padres-madres y profesores a quienes corresponde educar, enseñar y orientar. Desde el respeto mutuo.
Cierto es que no se puede generalizar y, afortunadamente, también son muchas las personas que viven desde los valores y la educación pero, si somos honestos, hay un gran aumento de los casos contrarios. Es muy necesario poner el foco en esto para buscar soluciones. Asumir la responsabilidad que a cada cual corresponde es fundamental. Dejemos de mirar en otra dirección. Corresponde a los padres-madres educar y a los profesor@s enseñar y reforzar los valores que han de venir de casa. Todos los adultos tenemos mucho por hacer en estos momentos. 
 

Lo relacionado con dicha temática lo trabajamos más a fondo en el CURSO DE MEJORA DE LA CONVIVENCIA Y EN EL CURSO DE PREVENCIÓN ADICCIONES TECNOLÓGICAS (y adicciones en general).

En sesiones individuales, en pareja, familiar o curso grupal.

Puedes ampliar información en el apartado de cursos y sesiones así como en los diferentes artículos relacionados del Blog.

La dependencia emocional ¿Amar demasiado es amor?

Los momentos compartidos, cuando son en armonía, nos llenan y nutren alma y corazón.

Las relaciones afectivas y sociales son fundamentales en nuestra vida (con familiares, amistades, pareja, compañer@s…), siempre que sean desde el respeto y cariño mutuo.

Normal sentir un amor especial hacia las personas que son importantes en nuestro día a día (nuestros seres queridos que, obviamente, no se refieren únicamente a miembros de nuestra familia).

Son muchas las personas que pueden llegar a sentir dependencia emocional y gran dolor en relación a una manera de “amar demasiado”; en desequilibrio y apego dañino (incluso enfermizo).

-Son casos de dependencia emocional:

  • “Amar demasiado a la pareja”
  • “Amar demasiado a los hijo@s”
  • “Amar demasiado al padre, madre, hermanos, abuelos, nietos…”

-Amamos demasiado y estamos desconectados de nosotr@s cuando hay gran enganche emocional y apego dañino sintiendo: miedos, preocupación, ansiedad, celos infundados…

-Amamos demasiado cuando no sabemos vivir (o nos cuesta mucho vivir) si esa persona no está a nuestro lado. 

-Amamos demasiado cuando el “amor” a otra persona nos genera desarmonía, desequilibrio, miedos, inseguridad, nerviosismo, obsesión…

Los casos más generalizados de dependencia emocional los encontramos hacia la pareja y hacia los hij@s (especialmente las madres).

  • A mayor dependencia emocional mayor es la desconexión de nuestro interior. Si no nos queremos y estamos descentrados más posibilidades hay de caer en este patrón. Equilibrar nuestra autoestima, querernos, cuidarnos, sentirnos felices en nuestra presencia, saber llenar nuestra vida por nosotros mism@s… es vital para salir del patrón de dependencia emocional.
  • Salir de este patrón nos ayuda a sentirnos más felices en nuestra vida, mejora la convivencia familiar, en pareja (si la hay)…
  • En los casos donde ha habido una ruptura y queda un gran enganche de dependencia emocional es fundamental trabajar aspectos relacionados con la autoestima, el autocuidado y autoconocimiento para, poco a poco, paso a paso, armonizar el dolor sentido y equilibrar nuestro interior. En ocasiones no es sencillo. Es un proceso de tiempo; con trabajo, dedicación y constancia es totalmente posible (buscar ayuda si fuera necesario). Aprender a conocernos, cuidarnos y querernos, es vital (con o sin pareja).
  • Es posible aprender a amar en armonía y equilibrio, sin apegos y enganches emocionales (por bien de un@, y de los demás).
  • Equilibrar todos los apartados de nuestra vida, sin centrarnos exclusivamente en uno, ayuda a salir del patrón de dependencia emocional. 

Es uno de los puntos que trabajamos dentro de los bloques:

EDUCACIÓN EMOCIONAL – ESENCIAL Y EDUCACIÓN EN VALORES. 

Fundamental trabajar la Autoestima, el Autocuidado y  el Autoconocimiento así como la Mejora de la Convivencia, aprendiendo una nueva manera de querer y relacionarnos (con nosotr@s y con los demás) en más armonía y equilibrio.

(En SESIONES INDIVIDUALES, EN PAREJA Y FAMILIARES)