Casos reales 8-9-10
CASO REAL 8
Encuesta a 118 alumn@s de 1º ESO (12 – 13 años)
-Todos los alumnos, salvo 6, indican que han utilizado el móvil de sus padres-madres y abuel@s desde que eran muy pequeños.
-Todos los alumnos, salvo 2, tienen móvil propio desde los 9-10 años.
-Utilizan el móvil una media entre 5-10 horas al día (principalmente para juegos, whatsapp, youtube y redes sociales como Instagram).
-El 90 % afirma que sus padres les dejan libertad absoluta en su uso y nunca hacen seguimiento (libre acceso a todo tipo de contenidos 24 horas al día).
-El 80 % afirma ver vídeos de contenido sexual y violencia desde los 9-10 años.
-El 90 % utiliza el móvil de madrugada (sus padres creen que están durmiendo). Muchas noches duermen un máximo de 4 – 5 horas.
-Siempre llevan el móvil con ellos. Pensar separarse de su dispositivo les genera gran ansiedad.
CASO REAL 9
Alumno de 3º ESO se pone muy agresivo y se salta la valla del instituto tras «retirarle» el móvil por utilizarlo en clase. Después de unos 15 minutos vuelve al centro con su madre.
Durante clase está utilizando el móvil y la profesora (tras varios avisos), cumpliendo con las normas de convivencia, organización y funcionamiento del centro (NCOF), le indica que entregue el móvil en jefatura de estudios, tal como se establece en gran parte de los centros educativos para que, después, los padres o tutores legales vayan a recogerlo. También, dependiendo de lo acordado en cada centro, puede ocurrir que se entregue al alumn@ al finalizar las clases. El alumno se niega en rotundo y comienza a mostrar una actitud disruptiva con gritos, insultos… Finalmente se consigue que lo entregue en jefatura de estudios pero rápidamente sale del centro saltando la valla del mismo. Tras unos 15´ vuelve con su madre quien indica que le devuelvan el móvil a su hijo inmediatamente o procederá a denunciar al equipo directivo y a la profesora implicada. El alumno está totalmente fuera de sí, en estado de gran ansiedad y violencia. La madre, con su actitud, desautoriza por completo al profesorado, no acepta las normas acordadas por el Consejo Escolar (donde hay representantes de toda la comunidad educativa) y da un poder que no corresponde a su hijo. Si hay unas normas de centro donde queda claramente establecido que no se puede utilizar el móvil en ningún espacio, ¿por qué la gran mayoría de alumn@s siguen llevando el móvil y lo utilizan en clase de continuo?
¿Alguien cree que con el móvil siempre encima van a estar centrados en su vida real, en sus estudios y en el aprendizaje?
Las interrupciones por este aspecto y otros son constantes, resultando muy complicado poder desarrollar el trabajo en muchos grupos.
La gran mayoría de padres-madres y adultos en general no son conscientes de cómo se dispersan y se distraen sus hij@s o alumnos con las pantallas (además de acceder a contenido totalmente inapropiado por edad). Tampoco son conscientes del gran número de horas que están con el móvil (cada vez más), restándolo del tiempo de vida real y de su descanso.
¿Qué hacen niñ@s y jóvenes utilizando el móvil y las redes sociales a todas horas sin tener aún criterio y madurez?
¿Cuáles son las consecuencias del uso excesivo de pantallas accediendo a todo tipo de contenidos inapropiados por edad?
El uso de pantallas a una edad temprana y en exceso potencia enormemente el déficit de atención, lo cual vemos en cada vez más niños y adolescentes (es una de las consecuencias que fácilmente podemos apreciar alrededor).
Niñ@s y adolescentes cada vez tiene más problemas de comunicación, expresión, sociabilización… Se multiplica la dispersión, el descentramiento, el déficit de atención. Muchos no leen nada, no muestran ningún interés por el aprendizaje, no saben jugar sin máquinas, no son capaces de disfrutar de casi nada…
Todo ello consecuencia directa de la adicción que tienen al móvil, redes sociales y pantallas en general.
CASO REAL 10
Padre paseando con su hija de unos 4 años y su mascota
Voy caminando por la calle y, de repente, el frenazo de un coche y un fuerte pitido hace que me gire. El conductor del vehículo comienza a llamar de todo al padre de la niña quien, según indica, iba paseando mirando tranquilamente el móvil mientras la niña y el perro iban correteando y jugando por la acera pero, en un momento, se bajaron de ella y el conductor tuvo que frenar en seco para no atropellarles. Lo lógico y natural sería que el padre (o quien fuese) caminase sin el móvil, pendiente de su hija y mascota, disfrutando del paseo con ellos.
Es muy llamativo ver cada vez más casos de personas caminando por la calle con el dispositivo en la mano sin despegar la mirada ni un solo segundo. Una cosa es utilizar el móvil por la calle de manera puntual o para atender una llamada urgente… pero, ¿realmente es necesario ir siempre pegados a la pantalla hasta paseando en la calle? Hay personas que siempre van así, a todas horas del día y en cualquier lugar.
Es realmente peligroso utilizar las pantallas de esta manera, y más aún con niñ@s y mascotas, además de perdernos por completo la vida real. Muchos adultos y cada vez más pequeños y jóvenes viven pegados a las pantallas día y noche.
Las pantallas pueden aportarnos mucho, siempre y cuando se utilicen de manera consciente. Es por ello que hay que educar en el uso adecuado de las mismas pues ya hay un elevado porcentaje de la población adicto a ellas sin darse cuenta de sus consecuencias.
Lo relacionado con dicha temática lo trabajamos en el CURSO 4 SESIONES DE PREVENCIÓN ADICCIONES TECNOLÓGICAS (y adicciones en general). En sesiones individuales o taller grupal. Contenidos: -1. Problemática actual en adultos, niñ@s y adolescentes. -2. Estudio de casos reales y pruebas científicas al respecto. -3. Cómo utilizar las pantallas de manera consciente y positiva. Pautas. -4. Orientaciones para el uso progresivo de pantallas (por tramos de edad); adquiriendo un criterio de selección de información adecuado y en límite horario. -5. Reduciendo el riesgo de adicción al mínimo a través de actividades saludables. |